Jesús, Rey admirable
y noble triunfador,
dulzura inefable,
totalmente deseable.
Quédate con nosotros, Señor
y haz brillar tu luz sobre nosotros,
aleja las tinieblas de nuestra mente,
llena el mundo de dulzura.
Tú, Príncipe de todos los tiempos,
Tú, Cristo, Rey de las naciones,
Tú, Rey de mentes y corazones
que aceptamos como único Juez.
El constante amor de Jesús
me consume sin descanso.
Para mí, dulce Jesús,
eres el fruto eterno de mi vida.
En cualquier lugar en el que me encuentre,
deseo siempre a Jesús.
Estoy herido de amor por Jesús
y todo mi corazón está ardiendo.
CITA
FRAY MARCOS Tú has nacido para ser rey. Para ello solo tienes que ser verdad (auténtico). Jesús dice: soy rey, no: soy el rey. Indicando así que todo el que se identifique con él, será también rey.
San Bernardo, «La verdad ha de ser buscada antes en nosotros que en los prójimos… Sé consciente de la facilidad con que eres tentado, de lo propenso que eres para pecar, y con este conocimiento personal te harás manso, y te acercarás a socorrer a los demás con espíritu de suavidad.»
«Son el enfermo y el hambriento los que se compadecen más profundamente del enfermo y del hambriento, porque lo están viviendo en sí mismos. (…) Para que a causa de la miseria ajena tu corazón se haga capaz de acoger esa miseria es necesario que primero conozcas tu propia miseria, para que encuentres el corazón del prójimo en tu propio corazón y, partiendo de tu propio conocimiento, comprendas de qué manera puedes ayudarle a él».
«Purificados en lo íntimo de sus corazones con la caridad fraterna, se deleitan en contemplar la Verdad en sí misma…»
«Estoy dotado de razón, soy capaz de la verdad; pero ¡ojalá no lo fuese si me faltase el amor del verdadero!»
Orígenes, “cuando pedimos que venga el reino de Dios, lo que pedimos es que este reino de Dios, que está dentro de nosotros, salga afuera, produzca fruto y se vaya perfeccionando…
Este reino de Dios que está dentro de nosotros llegará, con nuestra cooperación, a su plena perfección cuando se realice lo que dice el Apóstol, esto es, cuando Cristo, una vez sometidos a él todos sus enemigos, entregue a Dios Padre su reino, y así Dios lo será todo para todos…
Por consiguiente, si queremos que Dios reine en nosotros, procuremos que de ningún modo el pecado siga dominando nuestro cuerpo mortal, antes bien, mortifiquemos todo lo terreno que hay en nosotros y fructifiquemos por el Espíritu;”. El Reino está cerca. Opúsculo sobre la Oración, 25.
Santo Tomás, Dios es «ipsa summa et prima veritas, la primera y suma verdad» (S. Theol. I, q. 16, a. 5 c).
San Ambrosio, El que somete su propio cuerpo y domina su alma, sin dejarse llevar por las pasiones es dueño de sí mismo: Se puede llamar rey porque es capaz de gobernar su propia persona; Es libre e independiente y no se deja cautivar por una esclavitud culpable (Psal. 118, 14, 30: PL 15, 1403A).
Santa Teresa de Jesús, “Rey sois, Dios mío, sin fin, que no es reino prestado el que tenéis”. Camino de Perfección, cap. 22.
“La humildad es la verdad“, solía decir Santa Teresa.
CONC. VAT. II, “servir es reinar” (Lumen Gentium, 36)
Benedicto XVI, «Dar testimonio de la verdad» significa dar valor a Dios y su voluntad frente a los intereses del mundo y sus poderes. Dios es la medida del ser. En este sentido, la verdad es el verdadero «Rey» que da a todas las cosas su luz y su grandeza. Jesús de Nazaret, Tomo II, Capítulo VII, Parte III
Francisco “El Mesías de Dios, el Elegido, el Rey” se muestra sin poder y sin gloria. Su realeza es paradójica: su trono es la cruz; su corona es de espinas; no tiene cetro, pero le ponen una caña en la mano; no viste suntuosamente, pero es privado de la túnica; no tiene anillos deslumbrantes en los dedos, pero sus manos están traspasadas por los clavos; no posee un tesoro, pero es vendido por treinta monedas. Verdaderamente el reino de Jesús no es de este mundo; pero justamente es aquí donde encontramos la redención y el perdón. Porque la grandeza de su reino no es el poder según el mundo, sino el amor de Dios, un amor capaz de alcanza y restaurar todas las cosas. Por este amor, Cristo se abajó hasta nosotros, vivió nuestra miseria humana, probó nuestra condición más ínfima: la injusticia, la traición, el abandono; experimentó la muerte, el sepulcro, los infiernos. De esta forma nuestro Rey fue incluso hasta los confines del Universo para abrazar y salvar a todo viviente. No nos ha condenado, ni siquiera conquistado, nunca ha violado nuestra libertad, sino que se ha abierto paso por medio del amor humilde que todo lo excusa, todo lo espera, todo lo soporta. Solo este amor ha vencido y sigue venciendo a nuestros grandes adversarios: el pecado, la muerte y el miedo.
Miguel de Unamuno «Hay que buscar la verdad y no la razón de las cosas. Y la verdad se busca con humildad».
En los tiempos de la persecución del presidente Calles de Méjico, en 1926-29, los cristianos morían gritando: Viva Cristo Rey y la virgen de Guadalupe.
LA LÁPIDA CON EL NOMBRE DE PILATO
Hallan el anillo de Pilato, a 57 años del descubrimiento de la lápida en 1961. En ella se lee:
[DIS AUGUSTI]S TIBERIÉUM «A los dioses a Augusto Tiberio
[….PO]NTIUS PILATUS Poncio Pilato
[…PRAEF]ECTUS IUDA[EA]E Prefecto de Judea
[..FECIT D]E[DICAVIT] ha dedicado [esto]»
En 1968, se encontró un anillo de bronce con una inscripción que fue descifrada medio siglo más tarde y pudieron identificar en el anillo la imagen de una copa rodeada por el nombre de Pilato escrito en caracteres griegos.
Un cuento acerca del monarca francés Luís XIV muestra una característica de los reyes terrenos. Un día dos campesinos encontraron al rey cazando en el campo cerca sus tierras. El uno comentó al otro que el rey no se llevaba guantes. El segundo le replicó que a los reyes no les hacen falta guantes. Añadió que siempre tienen las manos en los bolsillos de la gente.
REFRÁN
Refrán español “A los galgos del rey no se les escapa liebre alguna”
proverbio chino: Siempre queda algo de fragancia en la mano que da rosas.
CONTO
ELIGIÓ AL REY
Érase una vez, un rey, que quería compartir sus bienes con todos sus súbditos, emitió un edicto invitándolos a visitar su castillo el 21 de noviembre de 2021.
“Todas mis riquezas: joyas, alfombras, muebles, relojes, coches … Todo lo que poseo se exhibirá en el gran patio del castillo. Puedes llevar todo lo que necesites.
Finalmente llegó el 21 de noviembre. Las puertas se abrieron a las 10 de la mañana y la gente, hombres y mujeres, jóvenes y mayores, comenzaron a llenar el patio.
El Rey, sentado en su magnífico trono colocado en el medio, podía observar el comportamiento de la gente. Era un mercado de pulgas grande, rico y gratuito. Hombres y mujeres codiciosos se llenaban los bolsillos y las cestas.
Una anciana, viuda, pobre y asustada se acercó al trono del rey y le preguntó: ¿Es cierto, Majestad, que puedo llevarme todo lo que veo aquí?
Sí, puedes elegir lo que necesites o quieras, respondió el rey.
Mirándolo con ojos brillantes, la anciana dijo: “Yo elijo al Rey”.
Por haber elegido al Rey, todo lo que poseo es también tuyo. Ella eligió al Rey, el dueño de las cosas, y pasó a formar parte de la familia del Rey. Solo las personas con canas pueden discernir lo que es valioso y lo que no se necesita.
ORACIÓN
Oración de S.Bernardo
Jesús, Rey admirable
y noble triunfador,
dulzura inefable,
totalmente deseable.
Quédate con nosotros, Señor
y haz brillar tu luz sobre nosotros,
aleja las tinieblas de nuestra mente,
llena el mundo de dulzura.
Tú, Príncipe de todos los tiempos,
Tú, Cristo, Rey de las naciones,
Tú, Rey de mentes y corazones
que aceptamos como único Juez.
El constante amor de Jesús
me consume sin descanso.
Para mí, dulce Jesús,
eres el fruto eterno de mi vida.
En cualquier lugar en el que me encuentre,
deseo siempre a Jesús.
Estoy herido de amor por Jesús
y todo mi corazón está ardiendo.
CANTO
Jesu Rex admirabilis de Giovanni Pierluigi de Palestrina https://youtu.be/BXQuOQccCWA
Xtreme Kids | «Brilla En Mi»
Athenas – Glorioso Rey en la Cruz
Athenas – Cristo Reina