CITA
« Jesús no fue bautizado por su bien, sino por el nuestro.».
« ¡Si al coger percebes…hay que se “mojarse”…
también al bautizarse!»
S.Son
San Hipólito, «Quien entra con fe en este baño de regeneración, renuncia al diablo y se alinea con Cristo, reniega del enemigo y reconoce que Cristo es Dios, se despoja de la esclavitud y se reviste de la adopción filial» (Discurso sobre la Epifanía, 10: pg 10, 862).
“sale del Bautismo resplandeciente como el sol y, lo que es más importante, vuelve de allí convertido en hijo de Dios y coheredero con Cristo” Sermón sobre la Teofanía.
San Efrén el Sirio “A veces nuestro propio cuerpo proporciona las aguas del bautismo, las lágrimas. Las lágrimas son las propias aguas bautismales del cuerpo que limpian, curan y renuevan la vida ”.
San Gregorio Nacianceno: «Cristo es bautizado; bajamos con él para subir con él.» … «Vino para sepultar la humanidad llena de pecado en las aguas. Vino para santificar el Jordán para nosotros.» (PG 36, 350)
S. Agustín, El Señor deseó ser bautizado “para proclamar con su humildad lo que para nosotros era necesidad”.
San León Magno, «Sé consciente, cristiano, de tu dignidad, y puesto que participas de la naturaleza divina, no vuelvas a los errores de tu conducta pasada».
Santo Tomás de Aquino, Lo que vuestro hijo recibirá en el bautismo es el mayor bien que para él pudierais pensar y desear .
San Francisco de Sales, solía decir que entre Jesucristo y los buenos cristianos no existe más diferencia que la que se da entre una partitura y su interpretación por diversos músicos. La partitura es la misma, pero la interpretación suena con una modalidad distinta, personal; y es el Espíritu Santo quien la dirige contando con las distintas maneras de ser de esos instrumentos que somos nosotros.
Catecismo, 537 Por el bautismo, el cristiano se asimila sacramentalmente a Jesús que anticipa en su bautismo su muerte y su resurrección: debe entrar en este misterio de rebajamiento humilde y de arrepentimiento, descender al agua con Jesús, para subir con él, renacer del agua y del Espíritu para convertirse, en el Hijo, en hijo amado del Padre y «vivir una vida nueva» (Rm 6, 4):
Enterrémonos con Cristo por el Bautismo, para resucitar con él; descendamos con él para ser ascendidos con él; ascendamos con él para ser glorificados con él (S. Gregorio Nacianc. Or. 40, 9).
Benedicto XVI “sumergirse siempre de nuevo en la inmensidad del ser, a la vez que estamos desbordados simplemente por la alegría” (Spe salvi, 12).
“Del bautismo brota el compromiso de «escuchar» a Jesús, es decir, de creer en él y seguirlo dócilmente, cumpliendo su voluntad”. (Fiesta del Bautismo del Señor, Domingo 7 de enero de 2007)
Papa Francisco, «Lo que Dios quiere del hombre es una relación “papá-hijo”, acariciarlo, y le dice: ‘Yo estoy contigo’».
Quique Martínez de la Lama-Noriega, “Si no enseñamos a nuestros hijos a seguir a Jesús, el mundo les enseñará a no hacerlo.”
René Cesa Cantón «Ser bautizado con el Espíritu de Jesucristo supone encontrarse con Dios y sabernos acogidos por él en medio de la soledad; sentirnos consolados en el dolor y la depresión; reconocernos perdonados del pecado y la mediocridad; sentirnos fortalecidos en la impotencia y caducidad; vernos impulsados a amar y crear vida en medio de la fragilidad. ¿Para qué ser bautizados/tener fe? Para vivir la vida con más plenitud, para vivir incluso los acontecimientos más sencillos e insignificantes con más profundidad. Para atrevemos a ser humanos hasta el final; para no ahogar nuestro deseo de vida hasta el infinito; para defender nuestra libertad sin rendir nuestro ser a cualquier ídolo; para permanecer abiertos al amor, la verdad, la ternura que hay en nosotros. Para no perder nunca la esperanza en el ser humano ni en la vida». ()
Película «Soul» se plantea uno de los protagonistas: «Dicen que naces para algo, pero ¿cómo sabes qué es esa cosa? ¿Qué pasa si eliges la incorrecta? O la de otra persona, y quedas atrapado».,. Comenta el protagonista de la película: «No sé qué voy a hacer con mi vida, pero sí se que voy a vivir cada minuto de ella».
Pagola, Si no nos dejamos reavivar y recrear por ese Espíritu, los cristianos no tenemos nada importante que aportar a la sociedad actual tan vacía de interioridad, tan incapacitada para el amor solidario y tan necesitada de esperanza.
Sobrado, El mayor problema de la Iglesia es hoy «la mediocridad espiritual» a todos los niveles..2016.
Tagore Fue tu voluntad hacerme infinito. Este frágil vaso mío tú lo derramas una y otra vez, y lo vuelves a llenar con nueva vida. Tú has llevado por valles y colinas esta flautilla de caña, y has silbado en ella melodías eternamente nuevas.
CONTO
EL ESPEJO, UNA HISTORIA DE AMOR
Renato casi no vio a la señora, en el auto parado al costado de la carretera. Llovía fuerte y era de noche. Pero se dio cuenta que ella necesitaba de ayuda.
Así paró su auto y se acercó. El auto de la señora olía a tinta, de tan nuevo. La señora pensó que pudiera ser un asaltante. El no inspiraba confianza, parecía pobre y hambriento.
Renato percibió que ella tenía mucho miedo y le dijo: “Estoy aquí para ayudarla madame, no se preocupe. Por qué no espera en el auto que está más calientito? A propósito, mi nombre es Renato”…
Bueno, lo que pasaba es que ella tenía una llanta pinchada y para colmo era una señora de edad avanzada, algo bastante incómodo. Renato se agacho, colocó el gato mecánico y levantó el auto. Luego ya estaba cambiando la llanta. Pero quedó un poco sucio y con una herida en una de las manos.
Cuando apretaba las tuercas de la rueda ella abrió la ventana y comenzó a conversar con él. Le contó que no era del lugar, que solo estaba de paso por allí y que no sabía cómo agradecer por la ayuda.
…Ella preguntó cuánto le debía. Ya había imaginado todas las cosas terribles que podrían haber pasado si Renato no hubiese parado para socorrerla. Renato no pensaba en dinero, le gustaba ayudar a las personas.
Este era su modo de vivir. Y respondió: “Si realmente quisiera pagarme, la próxima vez que encontrase a alguien que precise de ayuda, dele a esa persona la ayuda que ella precise y acuérdese de mi”…
…Algunos kilómetros después, la señora se detuvo en un pequeño restaurante, la camarera vino hasta ella y le trajo una toalla limpia para que secase su mojado cabello y le dirigió una dulce sonrisa…
La señora notó que la camarera estaba con casi ocho meses de embarazo, pero la misma no dejó que la tensión y los dolores le cambiaran su actitud…
…La señora quedó curiosa en saber cómo alguien que teniendo tan poco, podía tratar tan bien a un extraño. Entonces se acordó de Renato. Después que terminó su comida, y mientras la camarera buscaba cambio, la señora se retiró……Cuando la camarera volvió quiso saber dónde la señora pudo haber ido, cuando notó algo escrito en la servilleta, sobre la cual tenía 4 billetes de $ 100,00…..
.Le cayeron las lágrimas de sus ojos cuando leyó lo que la señora escribió. Decía: Tú no me debes nada, yo tengo bastante. Alguien me ayudó hoy y de la misma forma te estoy ayudando. Si tú realmente quisieras reembolsarme este dinero, no dejes que este círculo de amor termine contigo, ayuda a alguien.
Aquella noche, cuando fue a casa, cansada se acostó en la cama, su marido ya estaba durmiendo y ella quedó pensando en el dinero y en lo que la señora dejó escrito… Como puede esa señora saber cuánto ella y el marido precisaban de aquel dinero? Con el bebé que estaba por nacer el próximo mes, todo estaba difícil…
…Quedó pensando en la bendición que había recibido, y dio una gran sonrisa…
…Agradeció a Dios y se volvió hacia su preocupado marido que dormía a su lado, le dio un beso suave y susurró:
-Todo estará bien; te amo……Renato!
Tomado de Alejandro Illescas, Los cuentos de mis homilías
EL ÁGUILA REAL SE RESIGNÓ A VIVIR COMO GALLINA.
Un hombre encontró un huevo de águila. Se lo llevó a casa y lo colocó en el nido de una gallina de corral. El huevo de águila fue incubado y nació junto con los demás pollitos, creció con la nidada y a lo largo de toda su vida hizo lo mismo que hacían los otros pollos. Escarbaba la tierra en busca de gusanos e insectos, piaba como los demás y nunca tentó de volar, sino que como todas las gallinas no podía sino saltar y volar por algunos metros no más.
Pero un día, levantando los ojos, vio allá arriba en el cielo una magnífica ave que flotaba elegante y majestuosa por entre las corrientes de aire, moviendo apenas sus poderosas alas. El aguilucho miraba asombrado hacia arriba. ¿”Qué es eso”? Preguntó a una gallina que estaba junto a él. “Es el águila, el rey de las aves” respondió la gallina. Pero no pienses en ello, Tú y yo somos diferentes” .Y el águila, criada con las gallinas vivió y murió creyendo que era una gallina de corral. Había renunciado a ser lo que era, un águila real.
Un famoso dicho reza así:: “Decíme con quien andas y te diré quien eres”. Nos conformamos fácilmente con los de nuestro grupo de amigo o compañeros. No tenemos la fuerza de voluntad para vivir según nuestros convencimiento y nuestra fe. Nos acobardamos
Hechos a imagen y semejanza con Dios, y sobre todo, renacido por el agua y el Espíritu santo nos olvidamos de nuestra dignidad de hijos de Dios y discípulos del Señor. Jesús. Como Pedro en el patio del tribunal donde se juzgaba a Jesús, nos acobardamos a la primera contrariedad y no somos capaces de profesar con seguridad nuestra fe. Vivimos como los demás, nos conformamos con este mundo del cual Jesús no nos quiso alejar pero del cual nos quiso defender. «No te pido Padre que los saques del mundo, pero sí que los defiendas del Maligno» (Jn 17,15)
Si nuestro interés se concentra únicamente en los bienes materiales, si cortamos las alas a nuestros deseos de algo superior, corremos el riesgo de conformarnos a este mundo y reducir nuestras aspiraciones que nos conducirían a ser verdaderos discípulos de Jesús, auténticos cristianos. Nos limitamos a ser bautizados, a haber nacido de Dios, pero no nos comportamos como tales. Tal cual el aguilucho que aunque había nacido de un águila se conformó a vivir como gallina.
Tomado de P. Diego Millán
ANÉCDOTA
PATRIARCA ORIENTAL IGNACIO IV DE ANTIOQUÍA
En el Consejo Ecuménico de Upsala 1968, decía con gran lucidez:
Sin Espíritu, Dios está lejos, Cristo permanece en el pasado, el Evangelio es letra muerta, la Iglesia una simple organización, la autoridad un dominio, la misión una propaganda, el culto una evocación y el actuar cristiano una moral de esclavos.
Pero en el Espíritu, Cristo resucitado está aquí, el Evangelio es fuerza de vida, la Iglesia significa la comunión trinitaria, la autoridad es un servicio liberador, la misión es un pentecostés, la liturgia es memorial y anticipación, el actuar humano queda divinizado.
El espíritu de Jesús es bueno, es santo: el amor, el perdón, las bienaventuranzas, son un espíritu de vida, creativos. El espíritu es aliento vital, “ganas de vivir”, esperanza en el futuro.
Tomado de Tomás Muro
TERMINA NAVIDAD, EMPIEZA LA MISIÓN
Con la fiesta de hoy termina el ciclo de la Navidad. Esta tarde, después de vísperas, retiramos ya los símbolos del tiempo navideño y dejamos paso a las semanas de Tiempo Ordinario que precederán a la Cuaresma. En rigor, hoy sería el domingo primero del Tiempo Ordinario: pero en él siempre se celebra la fiesta del Bautismo. Mañana, lunes, sí es lunes de la 1ª semana…
Hoy sería bueno empezar la Eucaristía con el rito de la aspersión, sustituyendo al acto penitencial. Es un gesto simbólico que nos invita a recordar nuestro Bautismo, del que el Bautismo de Jesús es el prototipo, y a pedir a Dios que renueve en nosotros la gracia que nos concedió en aquel sacramento.
Tomado de José Aldazábal
ORÍGENES DE LA FIESTA
Desde el siglo IV en la fiesta de la Epifanía, además de conmemorar la adoración de los magos de Oriente, se hacía también memoria del bautismo de Jesús en el Jordán, junto con la manifestación del Espíritu y del Padre, y de las bodas de Caná, donde por primera vez Cristo manifestó su gloria (Jn 2, 11).
Poco a poco los cristianos sintieron la necesidad de separar esos misterios y celebrarlos en una fiesta aparte. A finales del siglo VIII se comenzó a conmemorar el bautismo de Jesús ocho días después de la fiesta de la Epifanía, es decir, el 13 de enero. Sin embargo el misal de san Pío V (1570) no le da el nombre de «Bautismo del Señor», y propone para el 13 de enero una misa de la «Octava de la Epifanía», en la que el evangelio que se lee es el de Jn 1, 29-34, en el que, a diferencia de la narración que hacen los tres primeros evangelios, no se contiene el relato completo del bautismo ni se menciona la voz que se hace oír desde el cielo. Las antífonas de esta misa tampoco hacen mención del bautismo. Hasta el siglo XVIII no recibió de nuevo el nombre de «Bautismo del Señor» ni contó con formularios propios. El misal del concilio Vaticano II propone esta fiesta para el domingo posterior a la fiesta de Epifanía tal y como la celebramos hoy.
Los estudiosos de la Escritura sitúan este episodio en torno al año 28 d. C., cuando Jesús -como señala Lucas en su evangelio- tenía alrededor de treinta años.
Tomado de Fray Manuel Ángel Martinez Juan
“HUEVOS PASADOS POR AGUA”.
Esto es: un huevo que no está ni crudo ni cocido. Que ha estado en agua hirviendo, sin terminar de cocerse. No era mucho de mi agrado la receta. Y siempre le preguntaba a mi madre por qué no lo cocía del todo, por qué lo dejaba medio crudo. Y siempre me decía: porque esto no es un huevo duro, sino un huevo pasado por agua.
¿Qué a qué viene esto de los huevos pasados por agua? Pues a que “bautizarse” significa literalmente “sumergirse”, hundirse en el agua -como si uno se ahogara o muriera-, «cocerse» al calor del Espíritu, para, al salir, aparecer como una persona nueva, como un “hombre nuevo”, como un “resucitado”.
“Si no enseñamos a nuestros hijos a seguir a Jesús, el mundo les enseñará a no hacerlo.”
Tomado de Quique Martínez de la Lama-Noriega, cmf
BAUTIZADO EN EL JORDÁN
El Jordán es el río de Israel. La Biblia lo cita más de 150 veces. Recorre unos 180 Km. en línea recta, pero su curso sinuoso serpentea a lo largo de 360 Km. Desemboca en el Mar Muerto, a 400 metros bajo el nivel del mar. Su nombre hebreo es «Yardén» y significa: ‘el que desciende’. En un terreno árido y semidesértico, su presencia es signo de vida. El bautismo de Juan Bautista, en las aguas del Jordán, era símbolo de vida interior y espiritual. Quienes recibían el bautismo se comprometían a vivir una vida nueva; cruzarían de nuevo el río Jordán y entrarían en la Tierra Prometida como el nuevo pueblo de Dios.
Tomado de Tiempo Interior
HIJO MIO E HIJO DE DIOS
Cuentan que san Luis, rey de Francia, cuando alguno de sus hijos pequeños recibía el bautismo, lo estrechaba con inmensa alegría entre sus brazos y lo besaba con gran amor, diciéndole: “¡Querido hijo, hace un momento sólo eras hijo mío, pero ahora eres también hijo de Dios!”.
Tomado de P. Sergio A. Córdova
GRACIAS POR EL DON DE LA FE
Se cuenta que san Francisco Solano, siendo ya religioso franciscano, fue un día a visitar su pueblo natal de Montilla, en España. Y, entrando a la iglesia de Santiago, en donde había sido bautizado, se fue derecho a la pila bautismal, se arrodilló en el suelo con la frente apoyada sobre la piedra y rezó en voz alta el Credo para dar gracias a Dios por el don de su fe. Algo casi idéntico repitió Juan Pablo II, cuando visitó Polonia por primera vez como Papa, en el año 1979. Acudió de peregrinación a su natal Wadowice y, entrando a la iglesia parroquial, encontró rodeada de flores la pila bautismal donde fue bautizado en 1920. Entonces se arrodilló ante ella y la besó con profunda devoción y reverencia. ¡Los santos sí saben lo que es el bautismo!
Tomado de P. Sergio A. Córdova
SÍMBOLO DE LA PALOMA
Con ocasión del bautismo en el Jordán, aparece como signo del Espíritu Santo. La paloma, en el simbolismo bautismal, va unida al agua y, según algunos Padres de la Iglesia, evoca lo que sucedió al fin del diluvio, interpretado también él como figura del bautismo cristiano. Leemos en el libro del Génesis: (Noé) “volvió a soltar la paloma fuera del arca. La paloma vino al atardecer, y he aquí que traía en el pico un ramo de olivo, por donde conoció Noé que habían disminuido las aguas de encima de la tierra” (Gn 8, 10-11). El símbolo de la paloma indica el perdón de los pecados, la reconciliación con Dios y la renovación de la Alianza. Y es eso lo que halla su pleno cumplimiento en la era mesiánica, por obra de Cristo redentor y del Espíritu Santo.
Tomado de San Juan Pablo II,
Audiencia General, 11 de julio de 1990.
MESÍAS:
Palabra que significa “consagrado con unción” (“ungido”), es decir, aquel que viene de la potencia del Espíritu del Señor. Jesús afirma delante de sus paisanos que estas palabras se refieren a Él: “Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír” (cf. Lc 4, 21).
Tomado de San Juan Pablo II,
Audiencia General, 5 de agosto de 1987.
SAN FRANCISCO DE SALES
Solía decir que entre Jesucristo y los buenos cristianos no existe más diferencia que la que se da entre una partitura y su interpretación por diversos músicos. La partitura es la misma, pero la interpretación suena con una modalidad distinta, personal; y es el Espíritu Santo quien la dirige contando con las distintas maneras de ser de esos instrumentos que somos nosotros.
D. Justo Luis Rodríguez
CHISTE
¡CUÁNTOS VIVEN ACOMPLEJADOS POR SU ROSTRO!
Recuerdo la anécdota de aquella Señorita que le decía a su Director Espiritual:
– “Padre, tengo algo que me da mucha vergüenza decirle”.
– Tranquila hija, ya nos conocemos. No tengas vergüenza.
– “Es que, Padre, me he mirado al espejo”.
– Eso no es ningún pecado, hija. Todos nos miramos al espejo.
– “Pero eso no es todo. Es que me he visto guapa”.
– Tampoco eso es pecado, hija, es un simple error del espejo.
El espejo nos puede engañar. Y nosotros nos podemos engañar mirándonos en el espejo que, por otra parte, es donde más nos miramos. Lo que realmente no puede engañarnos es el espejo de nuestro corazón donde, cuando nos miramos, en vez de nuestro rostro, contemplamos el rostro de Dios en nosotros.
P. Juan Jáuregui Castelo
POEMA
ÉL VIENE, VIENE SIEMPRE
¿No oíste los pasos silenciosos?
Él viene, viene, viene siempre.
En cada instante y en cada edad,
todos los días y todas las noches,
Él viene, viene, viene siempre.
He cantado en muchas ocasiones y de mil maneras;
pero siempre decían sus notas:
Él viene, viene, viene siempre.
En los días fragantes del soleado abril,
por la vereda del bosque,
Él viene, viene, viene siempre.
En la oscura angustia lluviosa de las noches de julio,
sobre el carro atronador de las nubes,
Él viene, viene, viene siempre.
De pena en pena mía,
son sus pasos los que oprimen mi corazón,
y el dorado roce de sus pies
es lo que hace brillar mi alegría.
Rabindranath Tagore
ORACIÓN
¡SUMÉRGETE EN LA VIDA Y BAUTÍZATE!
Hijo mío: tú no sabes lo que eres,
pues todavía no te reconoces obra de mi amor.
No sabes lo que eres en mí,
e ignoras las posibilidades que hay escondidas en ti.
Despierta y deja los malos sueños:
esa fijación en fracasos, fallos y frustraciones,
en cansancios, caídas y pasos en falso…
Todo eso no es tu verdadero yo.
¡Déjate amar y guiar y… ¡ya verás!
Tu colección de máscaras
y los disfraces que te pones
te pueden ocultar a los ojos de los demás
-quizás a tus propios ojos también-,
pero no pueden ocultarte a mis ojos de Padre.
Esa mirada, tu mirada, que no es clara,
y tu deseo febril, anhelante,
así como tus ambiciones, apetencias y ardores
tan queridos, tan tuyos, tan fuertes…
Todo eso no es tu verdadero yo.
Bajo todo ello, detrás de todo eso,
más allá de tus miedos y dudas,
de tus éxitos y fracasos,
de tu pasado oscuro o yermo…
yo te miro, yo te amo, yo te elijo
y abro las puertas del cielo para mostrártelo.
Tú eres un hijo a quien quiero.
¡Podría decir tantas cosas…!
No de ese tú que busca disfraces,
sino del tú que permanece en mi corazón
y que acuno como Padre/Madre en mi regazo,
del tú que puede aún manifestarse.
¡Haz visible lo que eres para mí!
Sé el sueño hecho realidad de ti mismo.
Activa las posibilidades que he puesto en ti.
No hay ningún don al que no puedas aspirar.
Llevas mi espíritu y mi sello y sangre.
Te beso, te amo, te libero, te lanzo…
Te abro a la vida y te hago dueño.
Y si todo esto es lo que yo hago,
¿qué te impide levantarte, andar y ser?
¡Estás en el mundo por tu bien y mi querer!
¡Sumérgete en la vida y bautízate!
Florentino Ulibarri
MEDITACIÓN
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
Recordando hoy el bautismo de Jesús, ponemos nuestra fe ante ti y ante todos los cristianos del mundo.
• Para que los bautizados seamos gente alegre, divertida, trabajadora, justa y, sobre todo, que ama mucho.
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
• Para que los que no sienten tu presencia en su interior, para los que no sienten tu dinamismo, hazte oír, Señor.
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
• Para que sepamos consolar, ayudar a tus hijos a ser expertos en el ser humano, para facilitar la vida alrededor.
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
• Para que todo el personal de tu iglesia sea un canto al amor, a la sencillez, a la justicia y a la alegría,
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
• Con su bautismo, Jesús comenzó su vida pública. Que nosotros, al reflexionar sobre él, sintamos la fuerza del Señor para presentarlo a los demás.
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
• Por los alejados, los que te rechazan, los que hacen locuras en tu nombre, hoy te pedimos que te hagas presente en sus vidas.
GRACIAS POR MI BAUTISMO, SEÑOR.
Recoge, Señor, la alegría con que hoy celebramos nuestro bautismo, lo recordamos y agradecemos con ternura, para que tú nos llenes de tu fuerza y misericordia.
Mari Patxi Ayerra
CANTO
Nacidos de lo Alto Hakuna
Jesús Adrián Romero – Como La Brisa
VIDEO
Sorpréndete QUIERO VER